No lo dudes, si realmente no quieres olvidarte de un evento importante en tu día a día, lo mejor que puedes hacer es optar por contar con los servicios de una buena agenda. En la misma podrás apuntar las cosas que tienes que hacer cada día. Sin lugar a dudas se presenta como la mejor opción para no olvidar nada.
¿Dónde puedo comprar una buena agenda diaria o semanal?
En el mercado actualmente hay muchas agendas entre las que elegir, pero no todas te van a dar los mismos resultados. Si realmente quieres que tu agenda pase a formar parte de tu día a día y no pase a ser algo aburrido, lo mejor que puedes hacer es optar por comprar una agenda original.
En UO podrás encontrar las mejores agendas originales diarias o semanales para ti. Esas agendas las podrás usar para apuntar las tareas pendientes, información de los clientes… Realmente están muy bien preparadas y te puedo asegurar que le podrás sacar buen provecho.
A la hora de comprar una agenda deberá adaptarse a tus necesidades. Tendrás que asegurarte que además de original es cómoda de usar y te ofrece sitio suficiente para apuntar todas las cosas. También debes valorar que en la parte trasera haya un apartado especial para apuntar datos como los datos de los clientes. Cuanta más información puedas añadir, más provecho le podrás sacar a la agenda.
Consejos para sacar partido a la agenda
Ahora vamos a mostrarte una serie de tips a través de los cuales te será más fácil sacar partido a la agenda que has adquirido a través de UO. Lo importante es que lo tengas todo bien organizado para que le puedas sacar mucho partido.
1- Escribe todo lo que sea importante
Es importante que apuntes en la agenda todo lo que pienses que pueda ser importante. No cometas el error de pensar que ya lo recordarás en el pasado porque lo más probable es que lo olvides.
Apuntar las cosas en la agenda no te llevará apenas tiempo y a cambio podrás tener la certeza de que vas a recordar todo con facilidad. No seas vago y apunta todo lo que creas que puede ser interesante en el futuro. Si no lo usas, pues no lo usas, pero al menos tendrás ese recordatorio.
2- Crea un listado de tareas pendientes
Crea una lista de tareas pendientes para el día siguiente y así no se te olvidará nada. Ese listado tendrás que hacerlo teniendo en cuenta la información que tienes en la agenda.
Solo necesitas reservar de 10 a 15 minutos antes de ir a dormir.
La tarea consiste en reflexionar y organizar tus actividades para el día siguiente. Si estás planeando para el próximo mes o semana, sería recomendable asignar un poco más de tiempo a esta tarea; unos minutos adicionales representan una inversión valiosa.
Usar bolígrafos de colores puede ayudarte a que la organización sea más sencilla.
3- Da prioridad a las tareas semanales
Identificar las cinco actividades más significativas que deben abordarse durante la semana y, a continuación, organizar los días de acuerdo con un plan para mantener una concentración efectiva. Los recordatorios adhesivos pueden resultar de gran utilidad en este sentido; puedes registrar tus ideas momentáneas en ellos y posteriormente incorporarlas en tu agenda.
4- Aprende a dar vida a las páginas de la agenda
Una agenda no tiene por qué ser aburrida. En ocasiones podemos añadir datos interesantes y aburridos para dar vida a las páginas de la agenda.
Si la agenda solo la vas a consultar tú, incluso puedes añadir dibujos con los cuales darle alegría a la misma. Recuerda, una agenda personal no tiene porque ser aburrida, incluso si solo la vas a usar a nivel laboral. Hay diferentes maneras de darle vida y alegrar la vista cada vez que la veas. Así consultar la agenda no se te hará tan pesado y disfrutarás de muchos otros beneficios.
5- Apuesta por el lenguaje positivo
El uso del lenguaje puede tener un impacto significativo en nuestra interpretación de las cosas. Dominar la habilidad de emplear un lenguaje persuasivo puede convertirse en una herramienta para influir en el pensamiento. Un ejemplo concreto de esto se observa al comparar las frases «notas de reunión» y «hacer notas de reunión».
La segunda opción, al incluir un verbo, sugiere una mayor acción e inmediatez. En otro contexto, al contrastar «hacer notas de la reunión» con «compilar notas de la reunión», la segunda expresión resulta más precisa y proporciona una comprensión más clara de la tarea requerida.
6- No llenes la agenda demasiado
No es imprescindible ocupar cada franja horaria de tu agenda; reservar un espacio para la tranquilidad también puede resultar beneficioso. Dedica este tiempo a cultivar tus intereses secundarios o simplemente para relajarte y meditar sobre la jornada.
Además, una agenda demasiado llena puede llegar a agobiarnos. Por ese motivo, en la medida de lo posible debes dejar huecos libres para no tener la sensación de la presión de estar demasiado ocupado. Y recuerda, los dibujos y las notas divertidas te harán sentir que la vida es más feliz y el trabajo no es tanto.
7- Guarda las agendas usadas
Si empleas tu agenda de manera eficaz, podrás utilizarla como un registro de tus pensamientos y emociones a lo largo del año. Revisar las páginas antiguas de tus planificadores es como dar un paseo por el sendero de los recuerdos. Estoy seguro de que notarás cuánto has progresado, y este es un motivo digno de celebración.
Guardar las agendas antiguas apenas te ocupará espacio y te ayudará a recordar cosas del pasado que en determinados momentos pueden serte realmente útiles. Como se suele decir, el saber no ocupa lugar. Y lo que hoy puede parecerte que no te va a interesar en el futuro, luego puede que te interese. Si tienes la oportunidad, guarda las agendas porque la información que hay en las mismas puede serte realmente útil. Por ejemplo, puede que te interese recordar el número de teléfono de X persona. Si no guardas esas agendas antiguas, no podrás recordarlo y en consecuencia no te podrás poner en contacto con ella.