La amenaza del coronavirus ya se cierne sobre más de 160 países alrededor del mundo. Todo hace creer que los efectos serán más graves que lo que se había anticipado, dejando cientos de miles de víctimas fatales.
Por esta razón, las naciones han tomado como medida la aplicación de dos semanas de cuarentena como una forma de reducir los contagios y frenar la propagación de este peligroso virus. Estos quince días de confinamiento significan completo aislamiento social y la permanencia en el hogar, lo que ha sido tomado de distintas formas por las personas.
Lo cierto es que la cuarentena puede ser aprovechada como un periodo destinado a la reflexión y al pensamiento en torno a nuestro comportamiento poco amable e irresponsable con el planeta, lo que resulta pertinente si se toma en cuenta que esta pandemia se originó por el consumo de animales salvajes por parte de los humanos.
Momento para el ahorro energético
Por estos días se ha comprobado que el coronavirus, particularmente la aplicación de la cuarentena, ha reducido los índices de contaminación atmosférica en varias ciudades de Italia, España y China. De alguna forma, el COVID-19 ha significado un inesperado y merecido descanso para el planeta.
Sin embargo, también hay que considerar que las personas pasarán más tiempo en sus casas lo que provocará que el consumo energético se dispare, lo que siempre termina siendo poco ecológico para el medioambiente. Por lo mismo, el periodo de cuarentena debe ser utilizado como una forma de fomentar el ahorro energético en nuestro propio hogar.
Hay fáciles maneras de conseguirlo, una de las más básicas, y aunque parezca obvia, es desenchufar todos aquellos artefactos que no se están utilizando. Esto resulta relevante si se toma en cuenta que el consumo fantasma o stand by puede llegar a representar cerca del doce por ciento del consumo total del hogar.
Un buen momento para ahorrar es cuando cocinas en el horno eléctrico, ahí puedes intentar meter todos los alimentos de una sola vez para no gastar tanto. También preocúpate de mantener este artefacto limpio, sin grasas y evita abrirlo durante la cocción. Otra medida útil es apagar el horno entre diez y quince minutos antes de que finalice el periodo para aprovechar el calor de su interior.
Piensa con la ampolleta
Durante este periodo se ha incentivado el home office o trabajo a distancia, por lo tanto, para no aumentar el consumo de energía eléctrica, procura realizar tus labores de oficina con luz natural. Además, trata de utilizar lámparas de bajo consumo con lo que podrás ahorrar hasta un ochenta por ciento de energía.
Para que tengas en cuenta: la iluminación consume entre el doce y el veinte por ciento del gasto de energía total de un hogar.
También, como esta parte del mundo se prepara para la llega del otoño, muchos ya piensan de qué forma temperarse. Una buena medida es revisar todas las fugas que puede haber en tu casa y repararlas para que así el proceso de calefacción sea más eficiente. Y no menos importante, asegurarse que las cortinas realmente protejan la temperatura de los espacios para evitar utilizar calefacción artificial.
Por último, si vas a planchar junta la mayor cantidad de ropa y hazlo todo de una vez, ya que este artefacto mientras más tiempo seguido lo utilizas, menos energía consume. Aunque quizás antes debas preguntarte qué tan necesario es mantener tu ropa planchada durante un periodo de aislamiento en casa.